Niños huérfanos y sin casa comparten lo poco que tienen con sus perros
Una sesión fotográfica expuso el fuerte vínculo que hay entre estos pequeños y sus fieles compañeros de ruta.
En la ciudad de Dhaka, Bangladesh, existe un pequeño parque llamado Robindra Shorbod.
Allí viven 10 niños en la calle , los cuales piden limosna y venden envases de plástico. Entre los diez niños comparten lo que ganan, para que todos logren comer algo. Lo más sorprendente es que también distribuyen sus ganancias con perros adoptados que se encuentran en el lugar.
Ha sido tan grande la unión entre estos niños y perros que han logrado formar una familia, dándose mutuamente apoyo y fuerza para vivir.
Ellos realmente son un ejemplo de compañerismo, y hechos como estos son los que lograrán recuperar el mundo que todos queremos, un mundo más solidario y menos egoísta.
El fotógrafo australiano Sam Edmonds, quiso retratar a estos pequeños junto a sus fieles compañeros de ruta. El resultado fue una sesión cargada de emotividad y carácter.
Michael, él es el fiel amigo de Al Amin
Ladin también adora a Michael
Para Osman, Tiger es el mejor perro
Sumaia junto a su perro preferido, Tiger
