El joven resultó con varias heridas de diversa gravedad, pero sin riesgo vital.
Carlos C.M, de 14 años, estaba en un edificio abandonado y a medio construir en el sector de Pailuco, Osorno, con el fin de abstraerse de la ciudad, además de pasar un buen rato con un grupo de amigos.
Con esa intención, los jóvenes subieron hasta el último piso, donde comenzaron a tocar sus instrumentos musicales y ensayar las canciones que preparan como banda.
El encuentro hubiese pasado inadvertido, de no ser porque en un momento Carlos perdió el equilibrio y cayó por un forado del suelo, terminando en el subterráneo de la construcción. Es decir, sufrió una caída libre de 8 pisos, aproximadamente 20 metros de altura.
Afortunadamente, lo que hubiese sido una muerte segura para el menor, fue evitado gracias a un lote de neumáticos que mitigaron su golpe.
Ante el hecho, sus amigos llamaron a emergencias y Carlos llegó semi incosciente al Hospital Base San José de Osorno, con múltiples fracturas en su cuerpo, aunque sin peligro de muerte.
“Tiene un TEC abierto grave, un hermatoma extradural, una fractura del techo de la órbita del ojo izquierdo y fracturas de varios huesos del brazo derecho y la columna vertebral”, comentó a Las Últimas Noticias el jefe de la UCI pediátrica del recinto, Daniel Núñez.