“Buscando a Nemo” casi mata a Nemo y podría pasarle lo mismo a Dory

Las consecuencias del estreno de la cinta “Buscando a Dory” tiene preocupados no sólo a los productores y realizadores, sino también a la comunidad científica. 

“Buscando a Dory” pretende convertirse todo un éxito de taquilla con su llegada al cine el próximo 16 de junio, emulando lo conseguido por su predecesor “Buscando a Nemo”.

La expectación por la cinta pone cualquiera a nervioso, incluyendo  la comunidad científica que tiene una buena razón para temer las consecuencias que ocasione la cinta.

Y es que en 2003, cuando lanzaron “Buscando a Nemo”, la historia de un pez payaso dedicado a buscar a su hijo en el océano, muchas personas quisieron tener su propio “Nemo”.

Las ventas del pez payaso se dispararon, ocasionando que al mismo tiempo la población en los arrecifes coralinos disminuyera.

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“Lo que la mayoría de la gente no sabe es que aproximadamente el 90% de los peces marinos que se encuentran en tiendas de acuario provienen de la naturaleza”, detalló Carmen da Silva, la autora de la investigación que determinó el terrible hallazgo.

Cerca de 11 millones de peces de acuario fueron importados a Estados Unidos en 2011 y más de 300 mil de ellos eran varias especies de pez payaso, pero en su mayoría Amphiprion ocellaris, nuestro famoso Nemo.

Las importaciones de estos animales crecieron en un más del 30% entre 2004 y 2008, tras el estreno de la cinta, entre 2008 y 2011 disminuyeron en comparación con el período anterior, pero se mantuvieron varios puntos porcentuales más altos que antes de la película.

Pero a pesar de que la moda de Nemo ha bajado su intensidad con el tiempo, de todas formas las poblaciones de peces payasos siguen sufriendo las consecuencias.

“Más de 1 millón de peces payasos son recogidos del arrecife para los acuarios cada año. Ahora, en algunas zonas, se extinguieron por demasiada captura y descoloración de los corales”, apuntó Da Silva.

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Sin embargo, esto no es todo, ya que si para Nemo resultó difícil soportar la fama, esto puede ser completamente fatal para Dory; consigna La Gran Época.

A diferencia del pez payaso, que es fácil de criar en cautiverio, para el pez cirujano regal (Dory) esto es imposible. Durante cuatro años los investigadores han tratado de hacerlo y con el estreno en la pantalla chica de la historia, se están quedando sin tiempo.