El pequeño animal falleció en la playa de Santa Teresita en Buenos Aires, luego de que un grupo de visitantes lo tomaran y lo pasaran entre ellos.
Un bebé delfín murió porque turistas lo sacaron del agua para sacarse selfies con él.
El joven delfín franciscano murió en la playa de Santa Teresita en Buenos Aires la semana pasada, luego de que un grupo de visitantes lo tomaran y lo pasaran entre ellos.
Luego de pasarse el animal como si fuera un trofeo, los turistas lo dejaron morir en la arena.
En fotos capturadas por el testigo Hernan Coria, algunas personas pueden ser vistos tomando fotos del cuerpo sin vida del mamífero.
Según la Fundacion Vida Silvestre, la especie franciscana está en una situación vulnerable a la extinción.
“El franciscano, como otros delfines, no puede mantenerse fuera del agua por mucho tiempo”, declararon en su sitio web. “Tiene una piel muy gruesa y grasosa que le otorga calor, por lo que el clima le provoca pronto deshidratación y muerte”.
Un vocero de Peta agregó: “En sus esfuerzos por tener una selfie novedosa, estos veraneantes mostraron una negligencia ingenua (y finalmente fatal) por la vida sacando a este bebé delfín fuera del agua, donde pertenecía”.
“Sólo podemos imaginar el trauma sufrido no sólo por este bebé, que fue pasado como un juguete por los turistas, pero también por su madre”.
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