Si lo que buscas es crear una verdadera obra de arte para el paladar, no dejes de tomar en cuenta estos puntos con los que de seguro impresionarás a todos tus comensales.
Para muchos, es indispensable un buen trozo de carne para hacer de un buen plato el mejor de todos. Por lo mismo, es escencial saber elegir el corte correcto y más fresco para conservar su sabrosura y a la vez, prevenir enfermedades cuenta Qué pasada.
¡Mira aquí estas útiles claves!
1. No debe deshacerse en fibras: si la carne se deshace en tus manos, es probable que haya sido adobada previamente o que ya no está fresca.
2. Debe ser elástica y jamás debe pegarse a tus manos.
3. El color del trozo de carne debe ser igual tanto en el corte como en la superficie.
4. Si llegara a crujir cuando la cortas, ¡deshazte de ella inmediatamente!, lo más probable es que contenga larvas de parásitos.
5. No debe ser ni demasiado oscura, ni demasiado clara. Si tiene unas manchas oscuras, es probable que esté rancia y que haya sido lavada.
6. Cuando escojas cerdo, la grasa no debe separarse de la carne, no debe tener mucha sangre y el trozo debe ser color rosado coral.
7. Puedes saber si la carne de res es fresca enterrando suavemente un dedo sobre la superficie, el agujero que se forme debe desaparecer rapidamente.
8. En el cordero, la mejor es siempre la carne con hueso.
9. ¡Pon atención al olor de la carne! Siempre debe ser suave, sin aromas extraños o de humedad. En casa, puedes picar la carne con un cuchillo precalentado. Si la carne está caducada, sentirás el olor desagradable.
10. No desestimes la grasa, esta puede decirte mucho sobre la calidad de la carne. En el caso del cerdo y la res esta debe ser siempre blanca, mientras que en el cordero debe tener color crema. Grasa amarilla es señal de que el animal era viejo. La grasa de carne de res debe fácilmente desintegrarse en migas, mientras que la de cordero es densa.
¡Esperamos con ansias que nos muestres cómo quedó ese delicioso plato de carne!
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