Las pecas, últimamente, se han vuelto toda una declaración estética. En este mundo, en el cual todos intentamos hacer lo que podemos para diferenciarnos del otro, esta característica genética pasó de una marca de burlas a una señal de distinción.
Algunas personas incorporan pecas falsas, incluso, del tipo arcoiris en su rutina de belleza para generar un efecto artificial, lo cual nos llevó a preguntarnos: ¿cómo es que se producen las pecas de forma natural?
Las pecas son producidas por células llamadas melanocitas, las que forman pequeñas áreas de piel en las cuales hay un incremento de melanina, que corresponde a la proteína que produce el color de tu piel, tus ojos y tu pelo. Por ende, cuando tu piel produce más melanina de la común, ¡se forman las pecas!
Estos pequeños puntos son un buen signo, porque generalmente sirven como pantalla contra el sol, funcionan como una especie de protector con armadura, cuidando tu piel de los rayos ultravioleta. Esto es diferente de los lunares, que también son producto de la melanocita y del agrupamiento de las células que dan pigmento a la piel en grupos, pero que a menudo pueden evolucionar hacia el melanoma, una forma peligrosa de cáncer de piel.
Cuando los puntos de melanina de las pecas son expuestos a la luz solar, pueden volverse más oscuros; mientras que cuando se las oculta del sol, pueden volverse más tenues y desvanecerse.
Desde una perspectiva genética, las pecas están vinculadas a un gen llamado MC1R, el que mapea y coordina todo el plano de la melanina de tu piel.
El MC1R tiene dos tipos diferentes de pigmentos entre los cuales elegir: eumelanina (marrón oscuro) y feomelanina (de color más rojizo y amarillo).
Cuando el MC1R está activo en tu sistema, produce eumelanina, que te da cabello más oscuro y piel que está protegida de los rayos ultravioletas.
La feomelanina, en tanto, se expresa en rasgos como la piel clara, el cabello rubio o rojo y las pecas. Por lo mismo, no todos los pelirrojos tienen pecas, puesto que el color rojo en el pelo es un rasgo genético recesivo y las pecas son un rasgo genético dominante.
La verdad que el cuerpo humano es una interminable fábrica de datos y detalles curiosos, solo hace falta mirar un poco más de la superficie, para que se revele la infinita complejidad de todo aquello que damos por sentado del organismo..