Se trata de Kinessa Johnson, una veterana de la guerra de Afganistán que comenzó a hacer justicia en favor de los animales a punta de balas.
Se llama Kinessa Johnson y es una veterana de la guerra de Afganistán que da que hablar desde que comenzó a ser justiciera con quienes cazan animales.
Con un vestuario guerrillero, Johnson sirvió 4 años en el Ejército estadounidense como instructora de armas y mecánica. Pero cuando volvió de Afganistán, decidió dejar la carrera militar pero se prometió a sí misma seguir luchando. Y lo consiguió.
“Nuestra intención no es dañar a nadie; estamos aquí para entrenar a los guardaparques para que puedan combatir la caza ilegal. La mayor parte del tiempo, cualquier persona que esté en la reserva con un arma es considerado una amenaza y se le puede disparar si los guardaparques sienten que es una amenaza. Nuestra meta es prevenir que ellos jalen del gatillo al enseñarles movimientos estratégicos y métodos de prevención”, cuenta ella.
Kinessa decidió unirse a VETPAW, una organización de veteranos que trabaja en conjunto con las Fuerzas Armadas y los encargados de conservación de distintas zonas del este de África. Dedica cada día a la protección de leones, elefantes y rinocerontes. La idea es cazar a los cazadores.