Hillary Clinton aún podría convertirse en presidenta de EE.UU. de esta polémica manera

El sistema electoral estadounidense, al ser de carácter representativo, presenta algunas posibilidades paradójicas que podrían sacudir a norteamérica y el mundo.

El mundo se estremeció el pasado martes 8 de noviembre cuando se supo que el multimillonario magnate inmobiliario Donald Trump se convertiría en el 45° Presidente de los Estados Unidos de América, tras vencer en los comicios a la candidata por el Partido Demócrata, Hillary Clinton.

Pero lo que aún confunde a muchos, es que en efecto, la esposa del ex Presidente Bill Clinton obtuvo la mayoría en el recuento de votos populares, es decir, más gente votó por la demócrata que por el empresario republicano, no obstante, este último se vio favorecido al obtener mayoría de votos electorales en los estados que más representantes llevan a la elección del Mandatario en el Colegio Electoral.

Dado esto, la votación de los representantes será realizada el próximo 19 de diciembre, y es en esta ocasión donde radica la última esperanza de Hillary Clinton en convertirse en la primera mujer Presidenta del país más poderoso del planeta. Eso sí, la eventualidad, en caso de concretarse, podría convertirse en un terremoto político que afectaría no solo a Estados Unidos, sino que al mundo entero, según publica The Sun.

Y es que en la legislación norteamericana no se especifica en ningún punto que los representantes en el Colegio Electoral puedan obviar el voto por el que fueron elegidos -el voto popular, que los designa según las preferencias de la gente hacia cierto candidato- y votar con su propia consciencia, o abstenerse de ejercer el voto. Es decir, estos representantes son las verdaderas personas que eligen al Presidente de Estados Unidos.

Este tipo de electores, tienen incluso una denominación en el ámbito, se les llama “tránsfugas” -”faithless electors” en inglés- y en caso de ejercer esta acción se les considera como un traidor político a la voluntad de la gente o coalición que los designa.

Cabe destacar que los miembros del Colegio Electoral son, por lo general, miembros de los partidos que han demostrado ser altamente fieles a la ideología que adscriben. Además, más de una veintena de estados en norteamérica cuenta con leyes que castigan severamente las tránsfugas.

Clinton necesitaría por lo bajo 20 electores que renieguen de su intención original y se inclinen por su voto, por lo que, pese a que existe la posibilidad, sería un escenario muy poco probable, y que sin duda no estaría exento de fuertes polémicas que de una u otra forma, afectarían gravemente la credibilidad del Mandatario que logre llegar al ejercicio.

Fotos: Shutterstock

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