La extrema medida que tomó el dueño de un bar contra sus clientes

La propuesta del local es que  sus clientes se diviertan a la “vieja usanza” y dejen de lado las nuevas tecnologías.

Asistir a un bar ya no es lo mismo que en el tiempo de nuestros abuelos. Lejos quedaron esos momentos en los que las personas pasaban un rato con amigos, hablando y compartiendo las experiencias diarias. Hoy la gente es esclava de su teléfono móvil.  A la foto para colgar en Instagram o en Facebook , ahora hay que sumarle hacer una divertida animación para compartir en Snapchat, y por qué no, atrapar un Pokémon durante la cena.

Cansado de ver esto, Steven, el dueño del bar inglés “The Gin Tub” decidió tomar cartas en el asunto y poner en práctica algo que le permita cambiar esta triste realidad. El tema era cómo hacerlo. Si bien sabía que la tarea no era sencilla, alguna solución tenía que haber para este problema.

¿Pero cómo lograr cambiar la conducta de tantas personas a la vez?

bar wifi 600

Luego de mucho pensar encontró una solución: anular el campo electromagnético en el interior del local y así bloquear la señal de los aparatos. La idea parecía un poco compleja, pero no era imposible. Steven decidió cubrir las paredes de su bar con papel de plata y forrar el techo con alambre de cobre de malla.

smartphone 600

Aunque la medida puede parecer un poco extrema e incluso autoritaria, la idea está funcionando. Al entrar a ese bar, los clientes viven una experiencia nueva. La propuesta es diviertan a la “vieja usanza”.

Steven no dejó nada libre al azar. En caso de emergencias, el bar cuenta con un teléfono fijo que permite llamar a la policía o a los servicios sanitarios.

Fotos: Shutterstock