La oscura historia detrás del Jägermeister y que nadie te ha querido contar
¿Amante del Jäger? Aquí te contamos la parte que muchas personas desconocen de esta bebida que está tan de moda.
No se trata de una novedad ver a alguien en una fiesta pidiendo un shot de Jägermeister, o en su defecto un Jägerbomb (el alcohol combinado con redbull). Lo cierto es que desde hace un tiempo hasta ahora, esta bebida alemana se ha transformado en el trago de moda, y es una botella que ya no puede estar ausente en las fiestas.
Su nombre es de origen alemán -como ya te habrás imaginado- y significa “maestro cazador”, término que se comenzó a utilizar en 1934 para referirse a los guardabosques de la administración pública alemana. En ese mismo año un apasionado por la caza, Curt Mast, quién además era un loco por la botánica y la química, comenzó a experimentar en la creación de esta bebida en compañía de uno de sus amigos.
Luego de agregar y agregar ingredientes a la mezcla (cerca de 56 tipos de hierbas), finalmente pudieron dar con el licor, bautizándolo como hoy lo conocemos.
La receta del Jägermeister es tan secreta como la de la Coca Cola, y se dice que solo 5 personas en el mundo la conocen en su totalidad.
El logo de la marca es una de las cosas más enigmáticas en torno al Jägermeister. La historia detrás del dibujo es bastante increíble, hace referencia a San Huberto, un joven cazador que realizaba la actividad por el simple gusto de matar.
La historia dice que en una de sus sesiones de caza, se topó con un venado blanco, el cual portaba un crucifijo luminoso entre su cornamenta. Al presenciar tal escena, San Huberto se convirtió al catolicismo, y con eso en el patrón de los cazadores, título por el cual Mast decidió dedicarle la imagen de su bebida.