Mamá, tengo Alzhéimer y quiero despedirme de ti

Esta es la dura historia de una madre que tuvo que cuidar de su propia hija con Alzhéimer.

Sin dudas, la vida para Beni Piedrabuena, de 76 años, no ha sido ni está siendo nada fácil.

Convivió durante 16 años codo a codo con el Alzhéimer, al lado de Juan, su marido a quien -con apenas 48 años- le comunicaron que padecía la enfermedad de la desmemoria.

Hoy su marido ya no está, pero increíblemente (o no) el mismo diagnóstico y a la misma edad recayó sobre Mari, la hija de Beni, hace ya casi siete años.

“Me podía haber pasado a mí y no a ella” dice Piedrabuena en El Periódico de Catalunya, publicación que reseña esta historia tan singular de vida.

Es que “el marido es una cosa y la hija otra”, remata.

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El corazón se detiene cuando recuerda cómo fue que se enteró de la enfermedad de su Mari. Y fue su propia hija quien llamó para contarle. Le pidió que fuera a la casa, que necesitaba despedirse. Nunca imaginó lo que iba a escuchar, dice Beni.

“Mamá tengo alzhéimer y quiero despedirme de ti porque dentro de poco ya no podré hacerlo”. Fue escuchar eso y fundirse en un abrazo.

Hoy habla de su hija y es como si hablara de otra persona. Cuenta que Mari sabía cuatro idiomas, era secretaria de dirección y buenísima persona.

“Ahora ni siquiera se comunica y desde hace poco ya no da besos, solo acerca los labios a tu mejilla”, cuenta Beni, quien además aclara que jamás se permite llorar. “Solamente cuando estoy sola, en mi casa”, apunta.

Beni piensa que la vida ha sido muy injusta con ella: a los 41 años salió victoriosa de un cáncer muy agresivo, tanto que apenas le daban nueve meses de vida. Sin embargo, su vida siguió, quizás porque todavía le faltaba cuidar a sus seres más queridos.

Foto: Darkday – Flickr / Shutterstock

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