Quedó atrapada en un incendio y estuvo a punto de morir calcinada. Sin embargo, el destino quería otra cosa.
Freddy, es una tortuga de Brasil y ha tenido una experiencia bastante dura. Vivía en un bosque, cuando quedó atrapada en un incendio, donde estaba destinada a morir calcinada. Pero sobrevivió, no comió durante 45 días y estaba con el 85% de su caparazón quemado.
Cuando la rescataron, sus cuidadores la nombraron Freddy, debido a que sus heridas les recordaban al personaje de películas de terror, Freddy Krueger.
Afortunadamente, la ciencia intervino y le ha dado una nueva oportunidad a Freddy.
Con una impresora 3D, el diseñador Cicero Moraes, creó una réplica de plástico del caparazón de Freddy. Está hecho de cuatro piezas que se encajan, basadas en la forma de una tortuga.
El caparazón artificial se ajusta como un guante a Freddy.
El artista, Yuri Caldera, se ofreció a pintarlo con el patrón de su especie.
Freddy es la primera tortuga que usa un caparazón impreso en 3D, funcionando como réplica.
El grupo, llamado a sí mismo como “Los Vengadores de Animales”, también ha salvado muchas aves mediante este método, la impresión de picos para los pacientes con lesiones o malformaciones. Es una ayuda innovadora y linda a la vez.
¿Qué te parece el espléndido trabajo de estos rescatistas? Cuéntanos en los comentarios.