Kasey ayudó a una anciana mujer en el supermercado, pero no sabía que lo que hacía tendría este inesperado resultado.
Kasey Simmons estaba de compras en su tienda local de comestibles. En la cola de la caja, se dio cuenta de otra compradora, una mujer mayor estaba claramente abatida. Otros compradores pasaron justo a ella, pero no la tomaron en cuenta. Simmons no lo hizo. Se dirigió a la mujer. No explicó por qué estaba triste, pero Simmons le levantó el ánimo e incluso pagó por su cosas.
Al día siguiente, estaba atendiendo en Applebees, donde es mesero, y llegó una pareja a pedir.
“Ellos ordenaron la cosa más barata en el menú… Agua saborizada”, dijo Kasey a WFAA.
La factura total era de $ 0,37. La propina fue de $ 500 y una nota, escrita en una servilleta explicando el por qué.
“Fueron sólo 17 dólares, pero no se trata de dinero… Se trata de mostrar que alguien te importa”, dijo el mesero.
La propina en el restaurante aparentemente provenía de la hija de la agradecida anciana. La nota en la servilleta describe la angustia de la madre mientras trataba de seguir con sus actividades normales en lo que fue el tercer aniversario de la muerte de su marido.
Simmons, con un nudo en la garganta, lee el mensaje en voz alta.
“En uno de los días más deprimentes del año… hizo maravilloso el día de mi madre… Usted insistió en pagar. Le dijo que ella era una mujer muy hermosa. No he visto a esta mujer sonreír así desde que murió papá”, dice la nota.
La bondad de Simmons hizo una diferencia, y la hija de la señora se lo quiso hacer saber. Por ahora, puede mantener la sonrisa, sabiendo que su simple gesto hizo un impacto incalculable.
Fotos: Capturas WFAA
