El sujeto fue condenado el año pasado a cadena perpetua por la muerte de dos personas. Sin embargo, las autoridades creen que habría más víctimas.
Niels H., un antiguo enfermero que trabajaba en un hospital de Delmenhorst (Baja Sajonia, Alemania), quien fue condenado en 2015 a cadena perpetua por asesinar a dos de sus pacientes, podría haber acabado con la vida de al menos otras 30 personas.
Luego de que la Fiscalía comenzara a sospechar que el hombre era responsable de más muertes, decidieron reabrir la investigación, exhumando y analizando 99 cuerpos, a la espera de estudios a otra centena de pacientes del hospital.
En 2008, Niels H. fue condenado a siete años de prisión por intento de homicidio y, tras confesar a un psicólogo que había asesinado a varias decenas de pacientes, su proceso se reanudó.
Durante el juicio, el sujeto expresó sus condolencias a las familias de las víctimas, aunque señaló que actuó “por aburrimiento”; consigna RT.
Respecto a su modus operandi, el hombre detalló que inyectaba sobredosis de medicamentos a algunos enfermos para disminuir su presión sanguínea, con el objetivo de llevarlos al borde de la muerte y demostrar su capacidad de reanimarlos.