Este joven que ha sobrevivido milagrosamente a los ataques de Bruselas, París y Boston
Los padres de Manson esperan que estos sucesos sean la suficiente mala suerte que el joven puede tener en su vida.
Un joven estadounidense que resultó herido en los ataques terroristas que recientemente remecieron a Bruselas vivió de cerca el horror por tercera vez, luego de haber estado en Boston durante los atentados de que sacudieron la maratón de 2013 y cerca de París en los incidentes del pasado 13 de noviembre.
Su nombre es Mason Wells, tiene sólo 19 años, y es uno de los tres misioneros mormones de Utah que se encontraba en el aeropuerto de Bruselas.
“Es su tercer ataque terrorista”, contó su padre Chad Wells, tras explicar que su hijo se rompió el tendón de Aquiles, junto con sufrir una herida en la cabeza, tener restos de balas en su cuerpo y quemadoras de tercer grado en su cara y piernas.
Manson vivió un episodio similar en París durante los ataques de noviembre de 2015, dado que se encontraba cerca de la capital francesa.
También le ocurrió en Boston, donde estaba a una cuadra del lugar donde estalló la bomba que ennegreció la maratón de abril de 2013. Se encontraba cerca de la meta con su padre, esperando la llegada de su madre que participaba de la competencia, cuando explotó el artefacto casero que dejó tres muertos y 246 heridos.
“Es un chico fuerte. La experiencia de Boston le ayudó a mantener la calma”, aseguró su madre, Kimberly Wells.
Para los padres de Manson, estas duras experiencias son una “prueba de carácter” para el chico, por lo que la casualidad para ellos no es “una maldición terrible, sino una bendición”; consigna La Patilla.
“Fue bendecido por Dios de manera significativa”, aseguró su padre, quien no teme por su vida y confía que estos sucesos sean la suficiente “mala suerte” que puede tener su hijo en la vida.
Ante esto, la mayor preocupación de la familia es que las heridas no dejen secuelas que impidan que Manson cumpla su sueño de unirse a la Academia de la Marina de Estados Unidos para servir en las Fuerzas Armadas de su país.
El joven viajaba con otros dos misioneros de Utah, Richard Norby y Joseph Empey, que también resultaron heridos durante los atentados perpetrados este martes en la capital europea, en los que murieron 31 personas y hubo más de 200 heridos.
