15 cosas que nos enseñaron de pequeños y que son completamente falsas

Aunque los padres o los profesores han insistido mucho en su veracidad, esta lista comprueba que no siempre están en la razón. 

Muchas son las creencias que consideramos correctas por el simple hecho de que nuestros padres, la televisión o los profesores lo dicen.

Por consiguiente, gran parte de las cosas que creemos saber no son más que mitos y aquí te presentamos una lista, recopilada por playgroundmag, de 15 enseñanzas que conoces desde pequeño, pero que no son más que una mentira.

1. Los perros no ven en blanco y negro: Son animales dicrónicos, lo que implica que pueden reconocer las diferencias de color peor que un ser humano, pero aún así tienen una variedad de colores y existe una prueba científica de que pesa más el color que el brillo en sus percepciones visuales.
2. Despertar a un sonámbulo no es peligro: A diferencia de lo que se cree, de que nunca se debe despertar a alguien que realice acciones dormido, esto no conlleva ningún problema más allá de la confusión o desorientación que muchos viven al despertar.

3. Los peces no tienen mala memoria: Se dice que los peses tienen sólo 3 segundos de memoria, pero no es así. Diversos estudios demuestran que determinadas especies pueden retener información hasta por 12 días.

4. Albert Einstein no era malo en matemáticas: Esta frase sirve para consolar a quienes no tienen ningún dote con los números, puesto que Einstein tampoco los tenía y descubrió grandes cosas. Sin embargo, esta creencia es completamente falsa, puesto que antes de los 15 años denominaba cálculo integral y diferencial.

5. Los seres humanos tenemos más de 5 sentidos: El gusto, la vista, el oído, el tacto y el olfato no son los únicos sentidos del ser humano, tal como lo creía Aristóteles, pues hay investigaciones que elevan esta cifra hasta los 27.

6. Orinar sobre la picadura de una medusa no alivia el dolor: Es la acción que se toma libros y películas cuando algún personaje sufre un accidente por la picadura de una medusa, pero no es más que un mito, puesto que esto sólo lo hace peor. El mejor remedio es limpiar la herida con agua salada, aplicar compresas frías y pomada con corticoides.

7. Isaac Newton no llegó a la noción de la gravedad después de ser golpeado en la cabeza por una manzana: El fruto cayó al lado del científico, no en su cabeza.

8. No necesitas esperar 30 minutos para volver al agua después de comer: Es quizás una de las recomendaciones más populares, especialmente por las madres, pero que no es más que una mentira. No existe el llamado “corte de digestión” en el que puedes sufrir calambres por sumergirte al agua antes de ese tiempo, puesto que estos ocurren sin dependencia del proceso digestivo.

9. No usamos sólo un 10% del cerebro: Cada área del cerebro está especializada, así que usamos prácticamente el 100%, aunque no al mismo tiempo.

10. La capacidad de detectar sabores no está de forma exclusiva en diversas secciones de la lengua: Todas las sensaciones degustativas provienen de todas las regiones de la lengua, aunque algunas partes son más sensibles que otras.

11. Las camellos no acumulan agua en sus jorobas: Exacto, los camellos no tienen sus jorobas formadas de agua, sino de grasa.

12. Napoleón no era bajo: Según la autopsia que se hizo a su cadáver, el francés medía 1,68 metros, un estatura por sobre el promedio de la época.

13. La Gran Muralla China no se ve desde el espacio: Ninguna de las viejas referencias que iniciaron este mito están basadas en evidencia real.

14. Las galletas de la fortuna no son chinas: Su origen se debe a un ciudadano estadounidense que vivìa en Japón.

15. Comer zanahorias no mejora la visión: Su consumo es bueno para la salud visual, gracias a su alto contenido en vitamina A, pero su efecto no es tan milagroso como nos hacen creer.