Lo golpearon, dispararon y detuvieron por error: recibirá esta ridiculez como compensación
Tales fueron las consecuencias que sufrió el joven que a cuatro años del hecho sigue sin querer ser fotografiado ni dar entrevistas.
El 7 de julio de 2012 DeShawn Franklin dormía en la tranquilidad de su habitación. De repente sintió un golpe en la puerta de su casa, ubicada en South Bend, Indiana, pero no sospechó que alguien podía venir a buscarlo durante la madrugada y menos la policía, puesto que no había hecho nada malo.
Los efectivos irrumpieron violentamente en su habitación con armas en alto. Lo golpearon en reiteradas ocasiones en el cuerpo y rostro, le dispararon con una Taser para dejarlo inactivo, lo esposaron y se lo llevaron detenido.
“No sabía qué estaba ocurriendo. Estaba dormido. Fue todo un gran shock y revuelo”, detalló el joven, en aquel entonces de 18 años, causando que la Policía de Indiana se diera cuenta que había cometido un error.
La familia no dejó pasar la equivocación y presentaron una denuncia por abuso de autoridad, entre otros delitos. A comienzos de agosto, una corte determinó que durante el operativo se habían violado los derechos constitucionales de Franklin, además de que lo habían arrestado e irrumpido de forma violenta en la vivienda sin orden judicial.
Pese al fallo, la pesadilla y la sensación de injusticia perdura en esta familia estadounidense, ya que el jurado determinó que los agentes que no respetaron los derechos de DeShawn y sus padres deben pagar un dolar por cada uno de sus delitos. En total, recibirán una ridícula indemnización de 18 dólares.
Sumado al daño causado durante la noche de la detención, el joven no ha podido superar el hecho ocurrido hace cuatro años, por lo que no quiere dar entrevistas ni ser fotografiado por miedo a algún tipo de represalia.
Afortunadamente, y en su defensa, DeShawn posee un registro policial irreprochable, por lo que puede dormir tranquilo a la espera de que la Justicia cambie su parecer y decida darle un podo de dignidad al caso; consigna The Washington Post.
Fotos: The Washington Post
