Aunque muchos insistan en que la crisis sólo es temporal, existen señales que demuestran lo contrario ¡Conócelas!
La crisis se respira. Un problema se apodera del ambiente, contaminando toda la relación y afectando el trabajo, el ánimo y el proyecto a futuro. Pero muchos siguen insistiendo, creyendo que es sólo un problema pasajero, sin detectar que el quiebre es cuestión de tiempo.
Pero es que ¿cuáles son los síntomas que se deben tomar en cuenta de que las cosas ya no tienen vuelta atrás?
La especialista en relaciones y directora del sitio Newlyweds, Francesca Di Meglio, estableció una serie de señales que anticipan el fin de un matrimonio o el cierre de un vínculo amoroso.
1. Hay diálogo, pero no comunicación: La comunicación no tiene que ser sobre temas trascendentales todos los días, pero si cada conversación se resume al clima, a lo que se hizo en el trabajo o en la lista del supermercado, hay un problema. Lo mismo ocurre cuando sólo una de las partes habla, mientras el otro simplemente escucha.
2. Pasan cada vez menos tiempo juntos: Es cierto que las parejas no deben estar juntas las 24 horas al día ni los 7 días de la semana, pero también hay que ser consciente de que esas rachas son cada vez más constantes. Es completamente sano reunirse con amigos, trabajar hasta tarde o perderse en internet, lo importante es detectar si está dentro de lo común o si son sólo mecanismos de escape.
3. No hay esfuerzo por mejorar las cosas: “Si uno pierde la motivación de luchar por la relación, habrá episodios que la debiliten. Y uno tiene que averiguar los motivos por los que aparecen esos episodios. Muchas veces, la falta de motivación es un indicador de que algo se perdió. Hay que investigar por qué sucede eso y qué es lo que uno verdaderamente quiere”, explica sobre este punto la especialista.
4. Se perdió la intimidad: No es que se deba intentar todas las noches tener sexo, pero cuando la pasión comienza a desapareces los augurios no son muy positivos. Es normal que las parejas pasen por períodos en que las relaciones sexuales son menos frecuentes, pero si esto se vuelve algo constante hay que preguntarse qué está pasando.
5. Se discute por lo mismo, una y otra vez: “Según mi experiencia, cuando las parejas vuelven una y otra vez a la misma discusión es porque se ha perdido el interés en el otro y en la buena salud de la relación”, destaca Di Meglio sobre este síntoma que no permite avanzar a una relación.
