De acuerdo a una investigación, las empresas productoras de este popular alimento doblarían la cantidad permitida de este peligroso ingrediente.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) destapó un escándalo alimenticio relacionada con la venta fraudulenta una marca de queso parmesano que anunciaba ser 100% natural.
El organismo identificó el “ingrediente secreto” de la marca Castle Chesse, cuya composición contenía nada más y nada menos que madera.
De acuerdo a la investigación, publicada por Bloomberg Businnes, descubrió que este queso con un costo mayor que el promedio sólo era una mezcla entre mozzarella, cheddar, queso blanco, suizo y una importante dosis de pulpa de celulosa.
El destape de la información se debe a un disgustado ex trabajador de la empresa, quien decidió presentar la denuncia a la FDA tras su despido en 2012.
La empresa estadounidense sólo en 2013 facturó más de 19 millones de dólares en ganancias, pero tras descubrirse la estafa tuvo que declararse en quiebra.
Sin embargo, este no sería el único caso, ya que la FDA descubrió que otras compañías ocupan la pulpa de celulosa dentro de sus ingredientes para la preparación del queso, puesto que actúa como agente anti-grumos. Pero la dosis segura no debe pasar el 4%, una cifra muy lejana de la encontrada por la entidad en varias fábricas, donde se detectó un peligro 8,8%.