Este hombre dice ser el verdadero Rey de Inglaterra y quiere destronar a la Reina Isabel II
Allan V. Evans dice ser benevolente y que esperará hasta la muerte de la reina para tomar el poder.
Las luchas por el trono no sólo se remontan a tiempos medievales. Son muchos los casos de personas que han querido deslegitimar los reinados de los actuales monarcas, para hacerse con el poder que tanto han anhelado y que creen merecer.
Tal como sucede en un episodio de la serie Juego de Tronos (aunque menos violento), un norteamericano nacido en Colorado reclamó ser el legítimo monarca de Inglaterra, por medio de una carta que envío a The Times en la que hizo público su deseo por arrebatarle el trono a la querida Reina Isabel II, cuenta Business Insider.
An American has taken out a big ad in the Times to say he’s the rightful king & intends to seize power. pic.twitter.com/ba1iQUyGer
— DavidMapstone (@DavidMapstone) 1 de marzo de 2017
Allan V. Evans, publicó los detalles de las razones del por qué reclama el trono del Palacio de Buckingham y dijo ser “un descendiente directo, de una linea directa de primogénitos documentada legalmente, desde el siglo tercero de Gran Bretaña y registrada en el Colegio Real de Armas”
Además, Allan V. Evans reclamará todas y cada una de las tierras de 17 estados históricos, títulos de hermandad, heráldicos, el título real y la corona de Gales; y seguirá persiguiendo una injusticia de la historia al reclamar su derecho al trono y la Corona Soberana de Gran Bretaña, en Westminster,
A pesar de las ansias que Evans tiene para ocupar el trono, mostró un profundo respeto por la Reina Isabel II y, por medio del documento publicado, señaló que “tiene respeto por el gran servicio y sacrificio desinteresado que ella y su esposo, Felipe de Edimburgo, han rendido a la nación” y que “esperará hasta el día de su triste muerte para perseguir el trono y adjudicarse el poder”.
Esta no es la primera vez que alguien de la familia Evans reclama el trono de Gran Bretaña. Hace algunos años, otro hombre con el mismo apellido y ascendencia reclamó 400 hectáreas en Twiggs, Georgia, argumentando que los terrenos le pertenecían a sus ancestros.
Ante tanta amenaza, la Reina Isabel II tendrá que cuidarse la espalda de los lobos sedientos de poder, si es que quiere seguir conservando el trono.
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