La estrella de Hollywood en un comienzo pesaba 98 kilos. Sin embargo, luego de unos meses, la aguja de la balanza solo marcó 83 kilos.
“La verdad es que no hice dieta, solo corté toda la basura”, señaló Jamie Foxx (49) respecto a cómo logró bajar 15 kilos en un reducido periodo de tiempo: seis meses.
Y es que el protagonista de Django Unchained -del director Quentin Tarantino- al subirse a la balanza en julio del año pasado se encontraba pesando 98 kilos. No obstante, luego de unos meses la aguja marcó 83 kilos.
De acuerdo al sitio Caracol Tv, el actor precisó que “comía pollo, pescado y vegetales”.
En esa línea, señaló que “en las siguientes dos semanas perdí 3,6 kilos, comencé a hacer ejercicio con mi entrenador y antes de darme cuenta estaba en 89,8 kilos. En las siguientes dos, tres, cuatro semanas y después, fue más despacito”.
En su nueva película, el thriler policial, Sleepless, Foxx interpreta a un detective de Las Vegas que tiene ciertos vínculos con el mundo criminal. El personaje exigía que estuviera en mejores condiciones físicas para llevar a cabo algunas acciones.
