Inició su negocio con 9 dólares y en un año lo convirtió en un imperio gastronómico
“La Insolencia” actualmente factura más de 3.000 dólares al día y da trabajo a más de 20 personas.
Dicen que el hombre crea en los momentos de crisis. Y eso es justamente lo que hizo el chileno Matías Leiva, de 35 años, quien agobiado por una millonaria deuda se vio en la necesidad de salir a vender a la calle, lo que convirtió en un exitoso negocio que hoy factura más de 3.000 dólares al día.
Como el mismo emprendedor reconoce, la idea nació de la necesidad. Le debía 12.000 dólares al banco, pero en sus bolsillos apenas tenía 9 dólares. Con ese dinero compró jamón, queso, harina y levadura, se puso a amasar y salió a vender los 12 sandwiches que pudo producir con ese material.
Desde el primer momento le dio un toque personal a la venta y eso se reflejó en que en los días siguientes tuvo que aumentar progresivamente la producción. Su negocio lo bautizó “La Insolencia”, un emprendimiento que actualmente vende más de 2 mil sandwiches diariamente.
El concepto es sencillo. Cada mañana, Matías y su equipo, compuesto por 21 trabajadores, preparan todos los sandwiches que venderán durante el día, para luego salir a ofrecer en más de 10 lugares del centro de Santiago, la capital de Chile. Todos usan un elegante uniforme y el valor agregado está en la variedad de sandwiches con toques de cocina gourmet que ponen a disposición de los clientes.
Leiva contó a La Tercera TV que su emprendimiento lo denomina como Drag Food: proveniente del concepto Drag Queen, y que ha resultado todo un éxito. “Ninguno de los que trabajamos en esto estudiamos algo relacionado, pero tenemos las ganas, somo profesionales en lo que hacemos”, dice el propietario de la marca.
En poco más de un año Matías ha logrado posicionar su negocio de sandwiches, y pretende seguir creciendo, pero sin olvidar que partió con los únicos 9 dólares que tenía en el bolsillo.
Fotos: Facebook.
