Existe un sencillo truco para verificar si efectivamente disfrutaremos de una buena cerveza, sin alteraciones en el sabor por otras sustancias.
Para saber si el vaso en el que beberemos cerveza está limpio, la mayoría de las veces lo miramos a trasluz para asegurarnos. Sin embargo, existe un método verdaderamente eficaz que debemos hacer si no queremos que el sabor se altere por la presencia de sustancias extrañas.
Y es que muchas veces los residuos de grasa o detergente, provocan que el sabor de la cerveza cambie en un cien por ciento, según indica el sitio Gizmodo.
Uno de los trucos, en el caso de que la cerveza ya esté servida, consiste en observar las paredes del vaso. Si las burbujas quedan agrupadas en pequeños grupos -como en la fotografía- es porque tiene restos de detergente.
Por otro lado, si la cerveza aun no está servida, es necesario mojar el vaso y espolvorearlo con sal. Si la sal no queda de manera uniforme a las paredes de este, es porque no está limpio.
¿Qué opinas?
Fotos: Captura de Youtube / Shutterstock.
