Si eres de los que siempre le echa poca gasolina al automóvil y siempre se te enciende la luz de alerta, ten cuidado porque estás haciéndole daño a tu máquina.
Lo más probable es que más de alguna vez has utilizado la bencina de tu automóvil hasta el final. A veces por desidia y en otras ocasiones por malos cálculos, extremamos los esfuerzos de nuestro motorizado que se traslada con mínima gasolina ¡hasta con el aviso parpadeando en el tablero electrónico!
En aquellas ocasiones es común que hagamos caso omiso a las advertencias y sólo acudamos a un surtidor cuando el vehículo está a punto de detenerse. Si lo hiciste más de una vez, o ya definitivamente estás acostumbrado a hacerlo, estás cometiendo un grave error y no deberías hacerlo nunca más. Quizás creas que es una exageración, pero luego de que te entreguemos algunos datos, de seguro que procurarás llevar tu automóvil siempre con una cantidad de gasolina adecuada.
De acuerdo a lo explicitado en Gizmodo, los vehículos pueden recorrer desde 60 a unos 80 kilómetros con el depósito en reserva, dependiendo del modelo y del estado del auto. Sin embargo, el funcionamiento de la bomba de gasolina depende del mismo combustible, ya que utiliza la gasolina como lubricante para algunas de sus partes y también como líquido refrigerante. Entonces, cuando comenzamos a usar la reserva del depósito y no existe suficiente bencina como para satisfacer estas dos necesidades de la bomba, se comienza a utilizar aire y gases como refrigerante.
Desde esa perspectiva, los gases no son capaces de reducir la temperatura de la misma forma que lo haría el líquido, por lo que se corre un riesgo de recalentar la bomba y sus partes de cobre. Ésto se trasunta en un desgaste de las partes rotatorias y, a mediano o largo plazo, esto averiará la bomba y terminarás quedándote accidentado en medio del camino.
Por último, utilizar el automóvil cuando le queda poca gasolina hace que la bomba absorba los sedimentos que se encuentran al fondo del depósito, que se quedarán atrapados en los filtros y obstruirán el paso de gasolina incluso cuando llenes el depósito, lo que tiene como consecuencia que el motor reciba menos combustible y no funcione correctamente.
Así que ya sabes qué hacer la próxima vez que salgas con tu vehículo. ¡Procura llenarlo de gasolina!
Fotos: Giphy / Pixabay
