Fue al médico por un simple mancha en su frente y todo se convirtió en una tragedia

La mujer fue al médico para que le dijeran si había algún problema. Ahora cuenta su historia para que a nadie más le ocurra.

Bethany Gambardella – Greenway es una madre común, tiene 39 años y vive en Austin, Texas, Estados Unidos. Un día fue al dermatólogo porque tenía una extraña mancha en su frente.

Ese año 2015, estaba embarazada de su segundo hijo, por lo que pensó que esa pequeña mancha se debía a un cambio hormonal. El médico le dijo que se trataba de una mancha, propia de la edad y se quedó tranquila.

El problema llegó meses después, cuando a Bethany le apareció una extraña verruga. Ya era tarde, el primer pronóstico estaba errado. Tenía un agresivo cáncer de piel llamado melanoma desmoplástico, cuenta Bored Panda.

Los médicos le quitaron esa parte de la piel, pero el cáncer se había extendido por sus huesos y a los nódulos linfáticos, por lo que tuvo que comenzar la inmunoterapia.

“La radiación era lo peor. Era sencillamente un infierno”, dijo Bethany.

“Me quemó el interior de la boca. Me dolía siempre la garganta. Tenía la piel llena de heridas, perdí la capacidad de saborear la comida, tenía la voz ronca, y en la tercera semana se me empezó a caer el pelo en la zona tratada”, cuenta en Facebook.

“Para cuando terminé el tratamiento había perdido 18 kilos, porque comer era una tarea horrible”.

“Ahora ya casi me he curado completamente de la radiación, que me ha dañado de forma permanente una glándula salival y ha alterado el nacimiento de mi cabello”, cuenta.

Si bien, el diagnóstico no la sorprendió, porque su madre tuvo algo similar, a su misma edad, Britany quiere crear conciencia en las personas de lo peligroso que puede ser el sol en la piel y que todos deberían usar crema protectora.

“Por favor, deja de tomar el sol y de ir a los rayos UVA. Un bronceado no es un resplandor saludable, es piel dañada”, asegura.

Fotos: Bethany Gambardella-Greenway – Facebook