Iba a comer todos los días con una foto en sus manos hasta que en el restaurante supieron la triste verdad

El anciano hombre de 93 años toma desayuno todos los días junto a una fotografía. Su historia es para romper el corazón.

Clarence Purvis es un anciano de 93 años. Todos los días va al Smith’s Restaurant, un local de Reidsville, Georgia, Estados Unidos a tomar desayuno. Pide lo que quiere comer y luego se sienta junto a una fotografía a disfrutar de su comida.

La foto este hombre comenzó a circular en las redes sociales, pero muy pocos saben cuál es la historia detrás de la imagen y que a muchos les partirá el corazón.

Clarence conoció a su verdadero amor en 1948. Ella tenía solo 16 años. Carolyn Todd era una estudiante de último año de la escuela Glennville High School cuando Clarence, de 24 años, la conquistó. Los dos se casaron el año siguiente y pasarían 63 años construyendo una familia, y construyendo un amor como pocos conocen.

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Durante los últimos 13 años, Clarence y Carolyn frecuentaban el Smith’s Restaurant, uno de los mejores lugares para comer en la ciudad.

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En octubre de 2013, ella dejó de venir con Clarence, porque había muerto. Sin embargo, después de su muerte, ella lo acompaña de otra forma.

Este hombre lleva una foto de su mujer todos los días al restaurante para comer en compañía de ella.

“Ella siempre estuvo conmigo cuando vivíamos juntos. Ella está conmigo ahora”, cuenta Clarence a la cadena WTOC.

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Joyce James, dueña del restaurante dice que siente que el anciano hombre ha tocado el corazón de cientos de clientes con un amor que traspasa la muerte.

“Le pregunté a mi marido: ‘¿Si me pasa algo, dejarás mi foto en la mesa?’ Él dijo: ‘No lo creo, querida… Te amo, pero eso podría ser un poco demasiado'”, cuenta James.

Clarence sabe que algunos podrían ver su tipo de duelo como algo extremo. Pero para él, el amor verdadero nunca tiene un final feliz, porque el amor verdadero nunca termina.

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En la tumba, Clarence se arrodilla, se quita el sombrero y besa el retrato de Carolyn que está pegado a la lápida de mármol y le habla a su esposa.

“Te amo cariño. Desearía que pudieras ir a casa conmigo, dice el anciano.

Fotos: Captura de Youtube

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