Se hizo un examen de ADN y cuando recibió los crudos resultados denunció a sus padres a la policía

No soportó la noticia y toda la rabia la llevó a realizar la acusación ante los tribunales.

Donna Price, una mujer británica de 32 años denunció a las personas que pensaba eran sus padres. Realizó la acusación de incesto tras enterarse de que su madre y su supuesto padre, eran hermanos.

Price señaló en una entrevista recogida por el periódico The Sun que su infancia fue absolutamente normal y feliz. Indicó que el descubrimiento destrozó a la familia. El caso terminó en los tribunales, donde la pareja se declaró culpable de incesto, por lo que evitaron ir a la cárcel. “Siento que mi infancia se basa en una mentira”, confesó Price.

“No hay palabras suficientes para describir lo mucho que los odio”, indicó. Durante la investigación policial se descubrió que el hombre que ella creía que era su padre biológico, no lo era. Una prueba de ADN ayudó a descubrir que su madre tuvo un romance anterior con un hombre que es el padre biológico, pero que Donna nunca conoció. La madre se separó de él en 1994. No obstante, sus tres hermanos menores sí son hijos biológicos de la actual pareja de su madre.

Dona descubrió en diciembre de 2014, gracias a unas pistas que le reveló una tía, que el hasta entonces su padre, no era su verdadero progenitor. Reconoce que se sintió muy mal cuando se enteró, como si estuviese enferma, pero consiguió mantenerse callada hasta reunir toda la información para llevarla a la policía. Realizó una investigación durante dos años para encontrar la verdad. Finalmente la pareja tuvo que enfrentar los tribunales y declararse culpable.

Su supuesto padre biológico, Robin Price, admitió que la relación era incorrecta, explicó que conoció a su pareja – quien es su media hermana – cuando ya eran adultos, y que cuando se enteraron de la conexión familiar , ya se habían enamorado. “Supongo que, mirando hacia atrás, no deberíamos haberlo hecho”, aseguró Robin.

La Ley de Delitos Sexuales de 2003 señala que es ilegal en Inglaterra y Gales tener relaciones sexuales con un adulto que esté estrechamente relacionado, incluyendo un padre, hermano y tía o tío.

Fotos: The Sun / Shutterstock