A pesar de la gran demanda que tiene su producto, el joven no ha dejado de estudiar ni cumplir con otros compromisos.
Fue a la edad de 13 años que Brennan Agranoff tuvo una especie de epifanía sobre lo que debía hacer con su futuro. Estaba viendo un partido de baloncesto por la tv, cuando se fijó que todos los jugadores llevaban puesto calcetines blancos. Todos iguales, sin nada que los hiciera únicos.
Así fue como le vino la idea de que se podrían imprimir diseños personalizados en los calcetines. Después de contarle la idea a sus padres, y un par de días de persuasión adolescente, estos le dieron 3.000 dólares para que impulsara su negocio. consigna La Voz del Muro.
Entonces Brennan estuvo investigando por seis meses como llevar su idea a la práctica y así nació su compañía, llamada HoopSwagg, la que instaló en el garaje de su casa.
Después de comprar cientos de pares de calcetines blancos, utilizó máquinas de impresión y prensatelas de calor para crear sus diseños iniciales. Luego de un año, contrató a un grupo de expertos en redes sociales, para que le ayudaran a hacer popular su marca, aumentando su alcance y, por añadidura, sus clientes.
One of the 2017 #Baylor Youth Entrepreneur Award recipients is making his mark with @HoopSwaggdotcom | via @CNNMoney https://t.co/o4zgfjQp6a pic.twitter.com/iZv5xkcdS1
— Baylor Baugh Center (@BUBaughCtr) 25 de abril de 2017
Actualmente, con solo 17 años, el joven tiene un ingreso promedio de 1 millón de dólares al año por la venta de sus calcetines, los que se pueden encontrar en Amazon, Etsy o eBay, y también en su página web.
El joven empresario cuenta con la ayuda de sus padres, se encargan de gestionar la empresa, para que el pueda seguir con sus estudios y demás compromisos.
Fotos: Facebook/Twitter/HoopSwagg.
