Atada y amordazada: el brutal caso de violencia a una mujer que denunció machismo en el trabajo
DeeAnn Fitzpatrick fue amarrada a una silla luego que denunciara el ambiente de discriminación y racismo.
Un indignante y brutal caso de violencia y racismo quedó al descubierto esta semana luego que la canadiense DeeAnn Fitzpatrick, denunciara el trato vejatorio del que fue víctima luego de denunciar el ambiente de discriminación que había en su trabajo.
La mujer denunció que en 2010 fue atada y amordazada por sus compañeros de trabajo en una oficina gubernamental de Escocia, como una represalia y advertencia para que guardara silencio.
El violento hecho ocurrió luego de años de acoso laboral y maltratos en una oficina de la Marina en la localidad de Scrabster. Aunque el caso está siendo investigado por la justicia, el incidente tomó revuelo luego que la BBC publicara una fotografía de Fitzpatrick amarrada a una silla.
La mujer aseguró que el oficial Reid Anderson, uno de los involucrados, le habría dicho que “esto es lo que pasa cuando denuncias a los hombres”, según señala Infobae.
Aunque Fitzpatrick denunció el hecho a sus superiores, se le bajó el perfil al asunto. “Estoy seguro que no quisieron hacer daño y solo se trató de chicos siendo chicos”, le habría respondido uno de sus jefes a través de un correo electrónico.
La mujer señaló que los abusos y casos de discriminación también afectaron a otros empleados que fueron acosados por su nacionalidad o raza.
Sin embargo, la justicia no puede tomar como evidencia la fotografía ni los correos electrónicos relacionados al caso, debido a que corresponden a tres años antes de que el caso fuera llevado a corte, lo cual sobrepasa el límite de tiempo en el sistema legal escocés para casos de abuso laboral.
Producto de esto último, Fitzpatrick deberán presentar nueva evidencia, por lo que su caso será finalmente recibido por una corte el próximo 13 de junio.
Foto: Thompsons Solicitors Scotland/DeeAnn Fitzpatrick
