Encuentran un barco hundido hace dos siglos con un botín de 16 millones de dólares

La nave se dirigía a Carolina del Sur cuando recibió el impacto de otra embarcación y acabó en el fondo del mar.

El 24 de julio 1840, el North Carolina zarpaba en dirección a Carolina del Sur, pero no llegaría a destino. En medio de la noche, la embarcación recibió un impacto de otra nave, provocando que en poco menos de 10 minutos terminara hundido en el fondo del mar.

El North Carolina parecía un simple barco de pasajeros, pero en realidad también era un correo del Gobierno norteamericano con una importante carga económica a bordo. Se trata de un botín de más de 16 millones de dólares que por dos siglos ha reposado a menos de 30 kilómetros de la costa de Carolina del Sur, en Estados Unidos.

No fue hasta finales de la década de los noventa cuando la compañía Marex trató de recuperar el tesoro. Tras varios días de duro trabajo, ‘solo’ consiguieron hacerse con una pequeña parte del tesoro, valorada aproximadamente en unos 750.000 dólares. La mayor parte se trataba de monedas de oro, muy poco comunes pero en gran estado de conservación, que pudieron extraerse de las capas más superficiales.

El resto no se pudo rescatar, debido a una serie de inconvenientes. Los restos del barco se encontraban a más de 20 metros de profundidad y en una zona con muy pobres condiciones de visibilidad. Pero no era el principal escollo, pues el gran peligro radica en que se trata de una zona anegada de tiburones, por lo que los trabajos de recuperación se antojaban complicados, más teniendo en cuenta la necesidad de perforar el fondo para conseguir recuperar las partes enterradas, recoge El Confidencial. 

Ahora, más de 20 años después, la compañía Blue Waters Ventures ha decidido retomar la búsqueda del tesoro perdido. El valor económico de las piezas podría alcanzar, al cambio actual, unos 16 millones y medio de dólares, aunque al tratarse de piezas únicas que estaban perdidas pero que se encuentran en perfecto estado de conservación podrían valer más, dado el alto grado de interés de los coleccionistas por hacerse con ellas.

Keith Webb, presidente de Blue Water Ventures, dijo que las monedas que han encontrado hasta ahora parecen casi como si estuvieran recién acuñadas, las que estaban ocultas, sin que la corriente las moviera.

Foto: Captura de video.