Se perdió hace 20 años cuando viajaba en tren con su padre y ahora se reencontró con su familia

La joven bielorrusa, actualmente de 24 años, logró encontrar a sus parientes biológicos a través de las redes sociales.

Un día de 1999, la vida de Yulia Moiséyenko cambió para siempre. La niña bielorrusa, de solo cuatro años en ese entonces, viajaba en tren junto a su padre, desde Minsk hasta Osipóvichi, cuando se perdió.

El hombre se encontraba bajo los efectos del alcohol y se quedó dormido. Cuando despertó su hija ya no estaba. Los padres denunciaron inmediatamente el extravío de la menor y toda Bielorrusia comenzó a buscarla, pero sin éxito.

Los años pasaron y no se produjo ningún avance en la investigación. Se desconocía si Yulia se había bajado del tren o si la habían secuestrado. Ahora, 20 años después, recién se ha conseguido saber cuáles fueron las causas de esta extraña desaparición.

Al parecer, la niña se bajó del tren por sus medios en la ciudad rusa de Riazán. Cuando la encontró la policía, fue dada en adopción, donde vivió momentos duros, ya que la obligaron a pedir limosna y dormir en la calle. Tiempo después fue a parar a otra familia de acogida, con la que llevó una buena vida, publica ABC.

Durante todos estos años la joven trató de encontrar a su familia biológica, pero de manera infructuosa. Sin embargo, gracias a la ayuda de su novio, recientemente consiguió encontrarlos a través de internet. El joven encontró unas declaraciones de una madre que perdió a su hija de cuatro años en la misma época en la que su novia fue hallada en Riazán, y esa fue la pista que comenzaron a seguir.

Todos los datos coincidían, así que continuaron con su investigación propia. Finalmente, madre e hija realizaron pruebas de ADN con saliva y una semana después se confirmó que efectivamente eran familia. Yulia confiesa ahora sentirse afortunada de haber encontrado a sus progenitores y de tener “dos padres y dos madres”.

Foto: ABC.