En sus inicios como actriz, la protagonista de “Bajos Instintos” tenía un “sueño absoluto” que se concretó con la cinta de 1995.
Sharon Stone es una de las actrices más reconocidas de Hollywood. Sin embargo, en sus inicios solo tuvo algunos papales desconocidos en películas de Woody Allen.
En esos tiempos, su gran sueño era actuar en una película de Martin Scorsese. Algo que veía algo casi imposible. “Trabajar con Martin Scorsese y Robert De Niro era mi sueño absoluto”, reconoce en conversación con LUN.
En 1995 su sueño se hizo realidad luego que el director estadounidense le ofreciera participar en “Casino”, precisamente junto a De Niro. “Fue el sueño que compartí con mi agente Roy London. Y conseguí lo que quería”, dice.
Gracias a su interpretación de “Ginger”, la esposa de Sam “Ace” Rothstein, personaje a cargo de De Niro, fue nominada a los premios Oscar y obtuvo el Globo de Oro a Mejor Actriz.
Sin embargo, la actriz de 62 años dice estar desilusionada porque siente que no fue considerada por otros directores de la talla de Scorsese. “Pero estoy desilusionada que otros directores de su misma altura no me hayan ofrecido trabajo, no entiendo lo que ocurrió”.
Stone sufrió un derrame cerebral en 2001, lo que la tuvo alejada de las cámaras por un tiempo. La actriz cree que eso pudo influir en que no la consideraran para otros papeles. “Se que me enfermé y me dio un derrame cerebral, pero ahora estoy bien y no he perdido mi capacidad para funcionar”, señala.
Pero la actriz está tranquila, ya que tiene varios proyectos a futuro, como la precuela de “Atrapado sin salida” de 1975 y otros trabajos en televisión y Netflix.
Foto: Captura de video