¿Trabajar 4 días a la semana para reactivar la economía tras la cuarentena?

La medida fue planteada por la primera ministra de Nueva Zelanda e iría en directo beneficio del turismo interno y la calidad de vida de las personas.

Nueva Zelanda ha sido un ejemplo para el resto del mundo sobre cómo manejar la crisis sanitaria producto del coronavirus. Desde el momento en que se confirmó el primer contagiado, el país oceánico tomó drásticas medidas para contener la propagación.

La forma en que manejaron la situación tuvo resultados positivos, al punto que a mediados de abril no registraron nuevos contagios. “Hemos ganado esta batalla”, dijo en esa oportunidad la primera ministra, Jacinda Ardern.

Tras el efectivo y rápido control del virus, Nueva Zelanda ya comenzó a relajar las medidas de confinamiento y ya están pensando en el mundo después de que pase la pandemia.

Como una forma de reactivar la economía, Ardern propuso que las personas trabajen solo cuatro días a la semana en vez de cinco, además de otras medidas de flexibilidad.

Según la mandataria, esta medida ayudaría a que las personas gocen de más tiempo libre y mayor flexibilidad en sus vidas laborales, lo que iría en directo beneficio del turismo interno, ya que la gente viajaría más.

“Escucho a un montón de personas que proponen que tengamos una semana laboral de cuatro días. En definitiva es algo que tienen que debatirlo empleadores y empleados”, dijo en un video publicado en Facebook.

Ardern se refirió a la flexibilidad laboral y el trabajo desde casa, aspectos que se vieron incrementados a raíz del confinamiento por la pandemia.

“El coronavirus nos ha enseñado muchas cosas, entre ellas la flexibilidad laboral y el teletrabajo y cómo la producción puede salir adelante de esa manera”, señaló.

La reducción de la jornada laboral, de cinco a cuatro días, es una medida que algunas empresas neozelandesas ya habían adoptado incluso antes de la pandemia y que podría encontrar consenso tras el fin de la emergencia sanitaria.

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