Bolsonaro amenaza con sacar al Ejército a la calle para “acabar con esta cobardía del toque de queda”
El mandatario brasileño nuevamente desestimó las medidas de prevención, a pesar de que el gigante sudamericano suma más de 14 millones de contagiados y el número de fallecidos está cerca de alcanzar los 400 mil.
Brasil no da señales de poder controlar el manejo de la pandemia del coronavirus, que hasta la fecha ya suma más de 14 millones de contagiados y el número de fallecidos está cerca de alcanzar los 400 mil.
Una gran mayoría culpa al presidente Jair Bolsonaro por su pésimo manejo de la pandemia, quien desde el primer momento le bajó el perfil a la situación y negó en reiteradas ocasiones la peligrosidad del virus.
A pesar de las miles de muertes, Bolsonaro sigue echando por tierra todas las medidas de prevención y ahora amenazó con sacar a las Fuerzas Armadas a la calle para “acabar con esta cobardía del toque de queda”, el que calificó de “caos”.
“Si tuviéramos problemas, tenemos un plan de cómo entrar al campo (…). Soy el jefe supremo de las Fuerzas Armadas. Nuestro Ejército, nuestras Fuerzas Armadas, si es necesario, iremos a la calle”, afirmó durante una entrevista a la cadena A Crítica.
“Nuestras Fuerzas Armadas pueden salir un día a la calle, eso sí, dentro de los cuatro renglones de la Constitución, para hacer cumplir el artículo 5. El derecho de movimiento, acabar con esta cobardía del toque de queda, garantizar el derecho al trabajo, la libertad de religión y culto”, señaló.
Bolsonaro atacó a los gobernadores y afirmó que sacar a los militares a la calle tiene como objetivo “cumplir todo lo que está siendo violado por algunos gobernadores y unos pocos alcaldes, pero que perturba a toda la sociedad”.
“Hemos conversado sobre ello; qué hacer en caso de que un caos generalizado se implante en Brasil por el hambre; por la forma cobarde como algunos quieren imponer esas medidas, con ciertas medidas restrictivas para que el pueblo se quede dentro de casa”, agregó.
Las declaraciones de Bolsonaro se dan en un momento crítico en Brasil, donde el descontrol de la pandemia ha dejado solo al mandatario y ha generado preocupación en el mundo entero por las variantes del Covid-19 que han aparecido en el gigante sudamericano.
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