Contraloría advierte a las FF.AA. que no son deliberantes por lo que deben abstenerse de emitir declaraciones

“Como instituciones subordinadas al poder civil, les queda prohibido cuestionar o debatir sobre las órdenes, decisiones o instrucciones impartidas por la autoridad civil”, señala el duro dictamen de la entidad fiscalizadora.

La Contraloría General de la República emitió un duro dictamen respecto a las declaraciones emitidas por altos mandos del Ejército y en especial, de su comandante en jefe Ricardo Martínez, en relación a los hechos de violencia durante el estallido social, como también por la carta enviada a La Red por el sketch realizado en el programa Políticamente Incorrecto, donde se hacía alusión a las ramas militares.

“El deber de obediencia de las Fuerzas Armadas dice relación con ajustar su actuar a lo que disponga tanto la autoridad jerárquica institucional como la autoridad civil de la cual dependen, esto es, al Presidente de la República a través de su colaborador directo e inmediato, el Ministerio de Defensa nacional”, señala el dictamen.

El documento, firmado por el Contralor General Jorge Bermúdez Soto, se debe a la solicitud presentada por los diputados Alejandro Navarro (Pais), Carolinza Marzán (PPD) y el abogado Luis Mariano Rendón.

“Su carácter no deliberante implica que, como instituciones subordinadas al poder civil, les queda prohibido cuestionar o debatir sobre las órdenes, decisiones o instrucciones impartidas por la autoridad civil a la cual están subordinadas, debiendo abstenerse de manifestar injerencia o favoritismo sobre posiciones políticas o contingentes que puedan esgrimirse por determinados sectores en la deliberación pública”, señala el texto.

El dictamen agrega que los funcionarios de las FF.AA. “no pueden realizar actividades ajenas a sus cargos, como son las de carácter político contingente, ni tampoco valerse de aquellos para favorecer o perjudicar a una determinada tendencia de esa índole”.

La Contraloría aclara que ambos deberes, el ser no deliberantes y su obediencia al poder civil, “cumplen la función esencial en el sistema democrático, configurándose como contrapesos asociados al monopolio legítimo de la fuerza que se les ha entregado”.

Respecto a las declaraciones del Comandante en Jefe del Ejército, Ricardo Martínez, donde se alude a la “vandalización de diversos monumentos” y la “personas que vuelcan su resentimiento y frustración”, la Contraloría señaló que “constituyen apreciaciones subjetivas y calificaciones sobre la contingencia nacional, que no guardan relación directa con las funciones propias de esa rama armada”.

La entidad fiscalizadora advierte que “de reiterarse, terminarán afectando el carácter no deliberante de las instituciones de la defensa nacional”.

Respecto a la carta enviada a La Red, Contraloría descartó algún tipo de irregularidad, señalando que no implicó “un involucramiento en cuestiones de política contingente, sino que fue una manifestación de su disconformidad con los hechos allí representados”.

En relación a su deliberación sobre política interna y en asuntos contingentes, la Contraloría señala que “podría perturbar el normal ejercicio del poder soberano que corresponde a las autoridades civiles”.

Fotos: Flickr Ejército de Chile/Wikipedia