El diálogo por CENCO de Carabineros que pone en jaque la versión oficial sobre la muerte de Pablo Marchant

La Otra Diaria accedió al extracto del diálogo que se dio entre los funcionarios y la Central de Comunicaciones de Carabineros el viernes 9 de julio en el fundo de la Forestal Mininco en Carahue, Región de La Araucanía. Las conversaciones que se dieron en ese momento contradicen las declaraciones posteriores entregadas por los mismos involucrados.

La noche del 9 de julio corrió como pólvora la noticia de que Ernesto Llaitul, el hijo del líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), había fallecido en medio de un enfrentamiento con Carabineros en un fundo en Carahue, Región de La Araucanía.

Pese a que la información fue dada por Carabineros a la Fiscalía, en la madrugada del día siguiente fue el propio Llaitul quien desmintió la versión oficial afirmando que la persona fallecida no era su hijo.

El fallecido era Pablo Marchant, un joven de 28 años amigo de la familia de Llaitul que, según la versión del Ministerio Público, perdió la vida luego de recibir un disparo en la cabeza a corta distancia en el Fundo Santa Ana tres Palos de propiedad de la Forestal Mininco.

El pasado 17 de noviembre, es decir, más de cuatro meses después de ocurrido el incidente, el medio La Otra Diaria publicó un “Pre Informe Metapericial Forense Criminalístico”, realizado por el tanatólogo Bernardo Morales, donde se reveló que Marchant fue ejecutado de rodillas “con apoyo del cañón en el punto de entrada del proyectil balístico”.

Este informe contradice al emanado por el Servicio Médico Legal (SML) y que sustenta la versión oficial que indica que Marchant recibió dos disparos, uno en el brazo y otro en la cabeza.

El 23 de noviembre, el abogado de la familia de Marchant, Rodrigo Román, presentó una querella criminal ante el Juzgado de Garantía y Letras de Carahue, en contra de los funcionarios de Carabineros que estuvieron el día de la muerte del joven comunero: el cabo primero Hugo Huenchuvil, el sargento segundo Eduardo Mora, y el conductor de la empresa de seguridad JM Ñuble (prestadora de servicios de forestal Mininco) Guillermo Santander.

La acción judicial -que acusa a los involucrados de los delitos de ejecución extrajudicial y apremios ilegítimos con homicidio- también incluyó el diálogo radial entre los funcionarios involucrados y la Central de Comunicaciones de Carabineros (CENCO).

La Otra Diaria dio a conocer un extracto de las comunicaciones que se dieron ese día, la que contradice la versión oficial sobre la muerte del comunero.

17:56:32: Personal COP Facción Santa Ana comunica que se encuentra siendo atacado por individuos desconocidos con disparos.

18:00:51: Coronel Sr Gutiérrez ordena que concurra al lugar el comandante Sr González.

18:01:29: Carahue 1 comunica que recibe llamado telefónico del Central monitoreo Mininco, que un trabajador de la empresa se encuentra lesionado.

18:05:53: Al momento es difusa la información, se desconoce si la persona fallecida es un comunero o un trabajador de la empresa.

18:09:45: Coronel Gutiérrez se traslada al lugar.

18:13:56: General Sr Bobadilla y General Sr González se desplazan al lugar.

18:42:59: Se le comunica vía telefónica al Sargento Mora que no manipulen evidencias, manifiesta que el área (está) asegurada.

18:45:18: Sargento 2do Ancamil con el Sargento 2do Mora en el sitio del suceso a cargo de la facción.

18:48:52: Coronel Sr Urrejola comunica que se confirma recuperación de un arma de fuego fusil en el sitio del suceso.

18:54:45: En el sitio del suceso hay un comunero masculino joven encapuchado fallecido con un fusil M-16 al costado.

20:28:27: General Bobadilla comunica que Carahue Uno llame a fiscal San Martín.

22:57:14: Fiscal Mauricio San Martín Lara.

Un dato clave es que al momento de su muerte, Marchant tenía entre sus pertenencias su cédula de identidad. Por ello, es a lo menos curioso que hasta ese momento de la transcripción no se informe la identidad de la persona fallecida.

La Otra Diaria habló con el abogado Román, quien señaló que la ausencia del nombre de Ernesto Llaitul -quien se creía que era la víctima- es una interrogante, ya que, si no es nombrado en la comunicación CENCO, cómo es posible que públicamente se haya divulgado esa información por parte del Ministerio Público.

Recién pasadas las 23 horas se deja constancia en el contacto con CENCO del nombre de Héctor Llaitul, quien explica que se comunicó con el Ministerio del Interior para poder ingresar al sitio del suceso.

En la misma transcripción de la comunicación de Carabineros con CENCO se afirma que ninguno de los funcionarios involucrados portaba cámaras corporales, pese a que desde enero de 2020 la institución estableció un “Manual de Uso y Registro de Videocámaras en el Servicio Policial”.

La información de que el fallecido era el “Nano”, hijo de Héctor Llaitul, comenzó a esparcirse por las redes sociales al punto de que el líder de la CAM reconoce que se enteró a través de las redes sociales.

Pero recién pasada la medianoche Llaitul hace ingreso al fundo de Forestal Mininco y a las 3:07 de la madrugada se confirma que el fallecido es Pablo Andrés Marchant Gutiérrez, según la transcripción de CENCO.

Otro antecedente que pone en jaque la versión oficial entregada por el Ministerio Público es que ninguno de los funcionarios de Carabineros portaba cámaras corporales.

Sin embargo, este dato es desmentido por la declaración del sargento segundo Edison Ancamil.

“Cuando yo estaba al interior del container con la persona lesionada, escuché que en el exterior habían otros funcionarios policiales, que le señalaron al funcionario Minte, ‘Minte soy el Mora mantenemos un monte 6’ por lo que yo salí al exterior y concurrí al lugar donde estaba ese funcionario policial que correspondía al sargento Eduardo Mora (…) Cuando yo salí del container comencé a grabar con la cámara Go Pro (fiscal), para así poder recopilar información”, dice su declaración según La Otra Diaria.

La versión de Ancamil también contradice la versión oficial que señala que Marchant estaba “con un fusil M-16 al costado”, como una forma de sostener la versión de que estaba armado y que su muerte fue en medio de un enfrentamiento.

“Cuando llegué donde el sargento Mora le pregunté qué había pasado, que quién era la persona que estaba en el piso y el sargento Mora me dijo ‘le pegamos un balazo a uno de los individuos, tenemos un armamento recuperado’, pero en ese momento yo no supe quién había herido al individuo, solo vi al sujeto tendido en el piso con una herida en el cráneo, pero yo no vi el armamento”, se lee en el documento.

Cabe recordar que la primera versión respecto a que el fallecido era el hijo de Llaitul ha levantado suspicacias desde un principio, tomando en cuenta la serie de montajes que pesa sobre Carabineros durante el último tiempo.

Fotos: Flickr/Shutterstock/Wikipedia