Enfermera despedida de Clínica Las Condes y que informó de la tercera dosis: “Hicimos lo correcto”

“Era lo que había que hacer, sabiendo que nos podía pasar esto”, dijo la mujer que hizo notar la irregularidad de inocular por tercera vez a Alejandro Gil, presidente del establecimiento de salud privado.

Un verdadero escándalo generó la noticia de que Alejandro Gil, presidente del directorio de Clínica Las Condes recibió una tercera dosis contra el Covid-19, esto a pesar de que el Ministerio de Salud aún no ha autorizado este tipo de procedimientos.

La enfermera que informó de la irregularidad fue despedida por una supuesta “causal grave”, por lo que no recibió indemnización por parte de la clínica.

Aunque su abogado le indicó que no diera ningún tipo de declaración, la enfermera señaló que “en el fondo, hicimos lo correcto”, refiriéndose al hecho de dar a conocer la irregularidad.

“Era lo que había que hacer, sabiendo que nos podía pasar esto”, dijo en conversación con TVN.

La mujer expresó que “se me despidió por una causal grave, con todo lo que significa irse a la casa sin un trabajo, sin indemnización. Eso no es secreto”.

Desde la clínica justificaron lo sucedido con que Gil es “una persona con alto riesgo de contagio y variadas preexistencia”.

“En el contexto señalado, el Sr. Alejandro Gil, no obstante haber sido vacunado con dos dosis, al realizarse un examen de Anticuerpos Spike, en razón de ser una persona con alto riesgo de contagio y variadas preexistencias, registró un resultado inferior al mínimo para considerar la existencia de inmunidad”, indicaron.

“En razón de lo anterior, y por expresas instrucciones de su médico tratante, se procedió a vacunarlo nuevamente. Sin perjuicio de lo expuesto, Clínica Las Condes procedió inmediatamente a presentar una autodenuncia al Ministerio de Salud, adjuntando todos los antecedentes referidos al caso”, agregaron.

Cabe recordar que las vacunas fueron compradas por el Estado de Chile, por lo que las dosis no pertenecen a un centro de salud o clínica privada.

A raíz de estos hechos, el ministro Secretario General de Gobierno, Jaime Bellolio, indicó que se instruyó una investigación sumaria, “porque en nuestro país nadie se puede saltar la fila en esta materia”.

“Es inaceptable que cualquier persona busque saltarse la fila cuando el Plan Nacional de Vacunación del Ministerio de Salud está en pleno desarrollo y estamos vacunando a los jóvenes de 17 a 12 años”, señaló.

Bellolio indicó que aunque el gobierno está esperando mayor evidencia científica para ver si es necesario una tercera dosis, “eso no es una instrucción que pueda ser, unilateralmente una clínica, ni menos una persona”.

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