Servicio Jesuita a Migrantes asegura que al menos 11 deportados no poseían antecedentes penales tras última expulsión

El gobierno chileno nuevamente concreto la expulsión de migrantes peruanos y bolivianos en un vuelo charter y que obedece a la estrategia para desmotivar la migración al país, tal como viene sucediendo en las últimas semanas..

Según se informó se trató de 77 extranjeros que fueron devueltos a sus países de origen por ingresar por pasos clandestinos o por haber cometido delitos relacionados con drogas, robo, tráfico de migrantes y delitos sexuales.

Hasta la fecha, 547 personas ya han sido deportadas en cinco vuelos rentados por el gobierno gracias a una nueva y estricta ley de migración impulsada por Sebastián Piñera y que se promulgó en abril bajo el concepto de “ordenar la casa”. La norma obliga a los extranjeros a obtener la documentación de ingreso a Chile, en sus países de origen.

Al respecto, Waleska Ureta, Directora Nacional del Servicio Jesuita a Migrantes, señaló que en tras la expulsión de personas migrantes de este miércoles han vuelto a observar irregularidades ejemplificadas en personas que a pesar de no tener antecedentes, el gobierno insiste en expulsar sin un debido proceso. “Este hecho sigue confundiendo a la opinión pública y lleva a una opinión incorrecta a la ciudadanía. Como SJM, hemos presentado un recurso de protección por una persona sin antecedentes penales y que lleva en Chile 15 años trabajando de forma honrada y manteniendo a su familia en Perú”, señaló Ureta. Agregó la directora de SJM que como servicio les surgen dudas respecto de la información oficial del gobierno, donde se indicó que 66 personas expulsadas provenían de cárceles y que cumplían condenas. Sin embargo, aseguró que persisten dudas respecto de cuáles fueron las condiciones que se dieron para la expulsión de las 11 restantes que no tenían antecedentes penales.

Cabe mencionar que hace algunos días Human Rights Watch solicitó al gobierno de Chile que ponga fin a las deportaciones masivas de ciudadanos venezolanos, aduciendo en muchos casos la falta de un debido proceso, antes de cada expulsión.