Fiscalía insiste en tesis de legítima defensa para sobreseer a carabinero que mató de 6 disparos a malabarista en Panguipulli

El fiscal regional de Los Ríos Juan Agustín Meléndez intentará sobreseer al sargento Juan González, imputado por el homicidio de Francisco Martínez tras un control de identidad el 5 de febrero de 2021. El Juzgado de Garantía de Panguipulli ya rechazó la solicitud, decisión que el Ministerio Público busca revertir en la Corte de Apelaciones asegurando que en los seis disparos del uniformado “ha operado la legítima defensa”.

Ya en diciembre del año pasado, el Juzgado de Garantía de Panguipulli rechazaba la solicitud de Fiscalía de sobreseer al sargento de Carabineros Juan González, autor de los disparos que mataron a Francisco Martínez en Panguipulli.

La muerte del joven malabarista de 27 años, abatido el 5 de febrero del 2021, causó gran conmoción y desató masivas protesta, desórdenes que culminaron con la quema de la municipalidad de la comuna.

Pero pese a la negativa del tribunal, el fiscal regional de Los Ríos, Juan Agustín Meléndez, insistirá en el sobreseimiento del uniformado y recurrió este lunes a la Corte de Apelaciones de Valdivia para revertir el fallo.

Según información de La Tercera, el Ministerio Público argumenta en su requerimiento a la corte que en el actuar del uniformado “ha operado la legítima defensa completa toda vez que se han acreditado los tres presupuestos: agresión ilegítima, necesidad racional del medio para impedirla o repelerla, y falta de provocación por parte del que se defiende”.

El procedimiento se dio en el contexto de un control de identidad al que Martínez se negó. De acuerdo a lo que expone Fiscalía, se produjo una discusión que derivó en que Martínez se abalanzara contra el funcionario policial para atacarlo “con un machete en cada una de sus manos”. Ante esto, el sargento González respondió con seis disparos.

Estos machetes de utilería eran parte de las presentaciones callejeras del malabarista. Según indicó la familia de la víctima y el propio Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), querellante en el caso, estos no tenían punta.

Sin embargo, Fiscal´ía plantea que el carabinero usó su arma “bajo circunstancias extremas de riesgo” y que últimos tres disparos, que fueron contra Martínez, se percutaron “en momentos que la víctima persistía en su actuar lesivo incluso abalanzándose sobre él, despojándolo de su gorra con la punta del sable”.