Hija de Sarika Rodrik ofrece asesorar al Presidente Boric: “Ya no es un pingüino, no puede seguir vestido como escolar”

Le robaron 400 millones de pesos en menos de una semana. Sigue molesta, no es para menos. Sin embargo, quiere ayudar, contribuir, no guarda rencor, o al menos es lo que manifiesta. Nicole Rosenberg cree en las buenas intenciones del Presidente Boric para lograr los cambios que desea llevar adelante, pero no cree en sus intenciones a la hora de elegir todas las mañanas sus prendas de vestir. La ropa y la imagen cobran para ella un valor igual o más relevante. Hablamos de la administradora de una de las tiendas de ropa más exclusivas de Santiago, la que asaltaron dos veces a fines de abril. “Feliz yo lo asesoraría”, es la oferta que extiende al mandatario. Pero ¿cómo pasa de hablar de la delincuencia a la moda en cosa de segundos? Y es que aquí el estilo, lo social y lo político van de la mano.

Por Pablo Yutronic

Avenida Isidora Goyenechea, comuna de Las Condes. Nos estacionamos al frente de “Sarika Rodrik”. Es imponente. Antes de bajarnos para ingresar, la mirada del guardia de la tienda no se despega de nosotros por largos minutos. Está en la puerta principal, la que será blindada en los próximos días. Todo es desconfianza, cualquier extraño es una amenaza y nosotros no somos la excepción.

Nos acercamos, nos presentamos y llega el relajo, o un cierto relajo, porque la tensión y preocupación por lo vivido hace menos de un mes no se va así de fácil. Nicole Rosenberg, hija precisamente de Sarika Rodrik, diseñadora y dueña de una de las tiendas de ropa más exclusivas de Chile, llega minutos después para la entrevista. Se ve afectada, pero entusiasta. No le pega al Gobierno, cree en las intenciones del Presidente Boric, al menos en cuanto a materia de seguridad se refiere.

“Este es un gobierno que sí quiere hacer cambios, independiente que yo haya votado por él o no, me represente o no, y que no tenga nada que ver con el Partido Comunista y me cargue, yo sí creo que el gobierno de verdad tiene una intención de hacer cambios”, dice Nicole.

Pero pese a la confianza que tiene en el mandato de Apruebo Dignidad, la administradora de Sarika Rodrik duda que esas reformas puedan concretarse con la delincuencia como el gran obstáculo que se interpone en medio del camino.

“Creo que si quieren cumplir con todas las promesas sociales que hicieron en campaña, pero si no se termina la delincuencia ¿cómo se van a cumplir todas esas promesas sociales? La base de la justicia social es la paz social”, reflexiona.

Y es en este contexto donde, en vez de quedarse en los lamentos y las quejas, Nicole muestra su disposición a colaborar y ser parte de la solución.

“Estoy dispuesta sentarme con ellos y trabajar en una mesa, para salir de la delincuencia, jamás me opondría, la idea no es oponerse a las buenas ideas que puedan tener. La idea es poder salir de esto lo más rápido posible. Este es un país de gente buena, de gente que se esfuerza, eso es Chile”.

“Ya no es un pingüino, no puede seguir vestido como un escolar”

El guardia al interior en el acceso de la tienda no quita la mirada para afuera. Nicole se ve relajada, mientras que su madre y dueña de aquel imperio de la moda, se da vueltas por los rincones de su lujosa tienda. Y si bien ella cree en las intenciones de reformas y cambios del Presidente Boric, no cree en sus intenciones a la hora de elegir su vestimenta.

Pero, ¿cómo pasamos de la delincuencia a la moda? El estilo va en el ADN de Nicole. Está en su naturaleza. “Y déjame decirte algo, yo feliz lo asesoraría”, asegura. La pregunta viene de cajón: “¿Por qué dice eso”? Nicole se explaya, está en su hábitat.

“El Presidente, de partida, no se viste, se tapa. Una cosa es vestirse y preocuparse, y la otra es andar tapado para no andar desnudo. No alcanza a vestirse mal porque anda tapado. Se nota que contrató a alguien para que le hiciera una pega de asesoría, y a esa persona yo la conozco, le tengo mucho cariño y hace su mejor esfuerzo, pero él no pone de su parte”, cuenta.

Nicole profundiza aún más en sus cuestionamientos al aspecto del mandatario: “Cuando uno es mal hecho, o sea, cuando no tienes buena estructura, buena facha, es chiquitito, gordito –que no es un pecado, para nada- , ahí tienes que entrar a invertir un poquito y preocuparse”, señala la hija de Sarika Rodrick.

Pero su crítica no queda aquí. Entra en las comparaciones, sacando a colación al presidente de Francia Emmanuel Macron. “¿Qué
tiene que ver?”, preguntamos. Nicole continúa.

“La camisa blanca de escolar no le queda, al señor Macron sí, porque tiene otra estructura, es flaquito. Pero la camisa blanca slim feat no le queda. Se quedó en la época de los pingüinos, y ya no es un pingüino, ya creció, no puede seguir vestido de escolar. Feliz yo lo asesoraría, estamos abiertos y dispuestos a hacerle una propuesta a La Moneda. Te digo que la asesora hace una pega titánica, ellos mismos (el Gobierno) se cierran a un mundo de opciones, porque no es pecado comprarse ropa importada”, dice.

Camila Vallejo, vestida “como burguesa más que como una comunista”

Es curioso, interesante, estar escuchando críticas de moda al interior de la “Sarika Rodrik”. El margen de interpelación es escaso. Nicole Rosenberg no solo se ofrece a asesorar a Gabriel Boric, sino que a todo su gabinete. Sin embargo, hay alguien que se salva. “La Camila Vallejo”, como ella le dice.

Sus flores hacia la ministra Vocera de Gobierno son evidentes, pero la crítica tampoco la deja de lado. Hay que tener presente que aquí la moda, el estilo, lo social y lo político van de la mano. Si Macron entró al baile, Marx y Engel también fueron invitados.

“La Camila Vallejo es impecable, ella está vestida como una burguesa más que como una comunista. Ella es una burguesa, como la mayoría de los comunistas, siempre han sido burgueses. Boric también es un burgués disfrazado de hippie, pero también viene de familia burguesa, igual que Marx y Engel, siempre fueron burgueses. Pero la Camila Vallejo se viste impecable, se pone sus labios rojos y los combina con sus anteojos rojos, tiene su peinado, es estilosísima”, asegura Rosenberg.

Quiere ayudar, sentarse con el Presidente, aportar como víctima de la delincuencia y empresaria del mundo de la moda. Para la hija de Sarika Rodrik no hay diferencias.

“Nosotros somos igual de inclusivos y de progresistas que ellos (el Gobierno). No porque estemos en Las Condes o tengamos los ojos azules y no hablemos de ‘todos, todas y todes y de ser menstruantes’ tengamos que excluir. Al contrario, somos muy inclusivos y nos encantaría poder ayudarlos”, concluye.