Minsal reconoce imposibilidad de una trazabilidad efectiva mientras personal médico hace frente al alza de hospitalizados

La subsecretaria de Salud Pública, María Teresa Valenzuela, se refirió a la estrategia “Si me enfermo, yo te cuido”, reconociendo que la alta contagiosidad de Ómicron, hace imposible un seguimiento de los casos activos. Mientras el Minsal espera revaluar la estrategia cuando pase la ola, el personal de salud, como durante toda la pandemia, ha debido hacer frente al aumento de ocupación de camas críticas.

El manejo de la pandemia del coronavirus por parte del gobierno de Sebastián Piñera se ha caracterizado por endosar la responsabilidad a la ciudadanía, como por ejemplo, cuando en los primeros meses de la crisis sanitaria, el por entonces ministro de Salud, Jaime Mañalich, dijo que todos son sospechosos de infectar “hasta que se demuestre lo contrario”.

Las declaraciones de Mañalich se daban en un contexto en que a las personas se les prohibía salir de sus casas y donde se infraccionó a muchos que estaban obligados a salir a trabajar ante la ausencia de ayuda económica del gobierno.

Hace un par de semanas el Ministerio de Salud anunció la nueva estrategia “Si me enfermo, yo te cuido” y que consiste en que la trazabilidad será responsabilidad de cada persona contagiada.

“La persona deberá dar aviso de su condición de caso confirmado a todas las personas que pueda contactar directamente con las que ha tenido proximidad desde los dos días antes del inicio de síntomas o dos días antes de la toma de muestra del examen PCR o test de antígeno”, dijo ayer la subsecretaria de Salud Pública, María Teresa Valenzuela.

La nueva estrategia se aplicó, según explicó la autoridad, debido a la alta contagiosidad de la variante Ómicron, lo cual hace imposible una trazabilidad como se hacía con las otras variantes.

Es de conocimiento público que la variante Ómicron es más contagiosa y ya está presente prácticamente en todo el mundo. Sin embargo, resulta curioso que la autoridad nuevamente haga responsable a la ciudadanía de los contagios, pese a que el mundo de la salud miraba con preocupación cuando el gobierno relajó las medidas de prevención y terminó con las cuarentenas.

“Este es un plan frente a esta variante. Obviamente que cuando esta gran ola que ha llegado de casos ya la superemos, revaluamos y nuevamente volvemos a ver el plan”, dijo la subsecretaria de Salud Pública, María Teresa Valenzuela, en entrevista con Radio Futuro.

“Sabemos que el testeo, trazabilidad y aislamiento es una estrategia fundamental del manejo de esta pandemia, pero este caso específico, ha sido exclusivamente debido a la alta transmisibilidad de este virus que no permite que el sistema alcance a llegar a los contactos”, agregó.

Mientras el Minsal espera revaluar la estrategia cuando pase la ola, el personal médico ha debido hacer frente al alza de hospitalizados por Covid-19.

“Se ha producido un aumento de ocupación de camas críticas por COVID en todo Chile”, dijo esta semana el presidente del Colegio Médico Valparaíso, Ignacio de la Torre.

En ese sentido, la subsecretaria reconoció que Chile tiene un sistema de salud por debajo de los países de la OCDE, quienes han comenzado a hablar de “gripalizar” el virus y tratarlo como una gripe y no como una pandemia, como lo ha propuesto España.

“Nuestras capacidades, si nos comparamos con todos estos países, Reino Unido, Dinamarca… nuestro país tiene un número de médicos, de enfermeros, de camas críticas, que son bajo los países OCDE, nuestro sistema es así”, señaló la autoridad por lo que no han discutido ese tema todavía.

En ese sentido, el Minsal instruyó a los centros médicos a ampliar camas críticas por primera vez en siete meses, a raíz del alza de contagios por la variante Ómicron.

El doctor Darwin Acuña, presidente de la Sociedad Chilena de Medicina Intensiva (Sochimi) se refirió al aumento de la ocupación de camas críticas.

“Es evidente que con el explosivo aumento de casos de COVID en nuestro país se ha visto un aumento de la ocupación hospitalaria, tanto de camas básicas y camas medias”, señaló.

“Es claro que los pacientes que no están vacunados tienen muchas más probabilidades de cursar con una enfermedad grave. Sabemos que hay pacientes con Ómicron que están hospitalizados en UCI, por lo tanto todos somos frágiles, estamos expuestos, y tenemos mayor riesgo de tener una enfermedad grave si no estamos vacunados”, explicó el médico.

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