Cinco ex funcionarios de la Armada son procesados por secuestro y torturas a militante socialista en la dictadura
Los efectivos en retiro de esta rama militar son investigados por su responsabilidad en las violaciones a los derechos humanos perpetradas contra Otilia Toro Parada, militante del Partido Socialista. Hace dos semanas la justicia ya había condenado al Estado por hechos similares cometidos por funcionarios de la Armada en la Región del Biobío, fallo que reconoció formalmente a la violencia sexual como forma de tortura en dictadura.
La Corte de Apelaciones de Valparaíso decidió procesar a cinco funcionarios en retiro de la Armada como parte de las indagatorias por el secuestro y tortura sufrida por Otilia Eliana Berta Toro Parada, militante del Partido Socialista.
Los hechos ocurrieron entre diciembre de 1973 y enero de 1974. El tribunal investiga las responsabilidades de Héctor Vicente Santibáñez Obreque, Valentín Evaristo Riquelme Villalobos, Bertalino Segundo Castillo Soto, Ricardo Alejandro Riesco Cornejo y Sergio Hevia Febres.
De acuerdo a la corte, Toro fue detenida en su propio domicilio el 26 de diciembre del ’73, tras lo que fue llevada al Cuartel Silva Palma de Valparaíso. Allí fue torturada para forzarla a entregar información sobre sus compañeros del partido.
Los mismos funcionarios de la Armada detuvieron a la mujer en una segunda oportunidad, donde volvieron a retenerla ilegalmente durante cinco días y volvieron a interrogarla y torturarla.
Este ya es el segundo caso de violaciones a los derechos humanos en dictadura en el que esta rama de las Fuerzas Armadas se ve involucrada durante este mes.
Hace dos semanas, la Corte de Apelaciones de Santiago condenó al Fisco a indemnizar a tres víctimas de detención ilegal y tortura en la región del Biobío, crímenes perpetrados por efectivos de la Armada durante la dictadura.
Ese fallo fue valorado por la abogada de una de las víctimas, ya que reconoció formalmente la violencia sexual como un método de tortura empleado durante el régimen del dictador Augusto Pinochet.