Jackson llama a resolver diferencias “de manera interna” y no mostrar una “fractura” oficialista tras críticas del PS por proyecto de indulto

Molestia generó en los senadores socialistas el anuncio del Gobierno de poner suma urgencia a la iniciativa para indultar a los presos de la revuelta. Por eso, el ministro de la Segpres los llamó a procesar los desacuerdos en privado y no dar “la sensación de que eso nos está fracturando”. Eso sí, Giorgio Jackson admitió que “vamos a tener que mejorar en la comunicación”.

El ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Giorgio Jackson, abordó los desacuerdos que se produjeron esta semana entre el Gobierno y senadores del Partido Socialista (PS) respecto al proyecto de indulto a los presos del estallido. 

Considerado el hombre fuerte de La Moneda y brazo derecho del Presidente Gabriel Boric, Jackson aclaró que ningún senador PS está en contra de la moción. Más bien, “lo que hay es una diferencia respecto del tiempo en el que se debería poner en votación por los efectos políticos que podría tener ganar o perder esa votación”, precisó el secretario de Estado en conversación con La Tercera. 

En otras palabras, la divergencia está en la forma y no en el fondo. 

El conflicto surgió el pasado lunes, cuando desde La Moneda comunicaron que le pusieron suma urgencia al trámite legislativo del proyecto de indulto, de tal manera de agilizar su avance. 

Esto molestó a la bancada de senadores PS, la cual emitió un comunicado afirmando que la acción del Ejecutivo “no asegura contar con los votos para aprobarlo en ambas cámaras”.

Incluso, los parlamentarios oficialistas acusaron que el Gobierno no ha hecho el trabajo necesario en el Congreso para garantizar el visto bueno al indulto. 

“No basta con ponerle urgencia a un proyecto, más aún si esa decisión no es conversada con las distintas bancadas (…) El gobierno debe impulsar proyectos con convicción, pero también habiendo hecho el trabajo prelegislativo que, ojalá, asegure su aprobación”, señalaron. 

Esa aprobación está amenazada sobre todo por la configuración del nuevo Congreso, donde la derecha –principal opositora al indulto– ganó un importante peso político. Por ello, como advierte el PS, resultan fundamentales las conversaciones entre el Gobierno y el parlamento. De lo contrario, el proyecto corre el riesgo de fracasar, lo que sería una dura derrota para Boric, pues la liberación de los presos del estallido fue una de sus principales banderas de campaña y gracias a la cual, en parte, logró llegar a La Moneda. 

Sin embargo, a juicio de Jackson, los desacuerdos con los senadores oficialistas son subsanables. Después de todo, dice, “tenemos un pacto de gobierno que está estructurado en base a dos coaliciones políticas, y eso es una innovación”. 

Eso sí, el secretario de Estado plantea que para alcanzar los tan necesarios acuerdos se requiere de una buena comunicación con todos los sectores, la cual –reconoce– no ha sido del todo fluida durante estas primeras dos semanas de Gobierno. 

“No estamos acá para hacernos amigos de todos los que sean de distintas coaliciones (…), pero estamos acá para ponernos de acuerdo en torno a aquellas cosas que como gobierno nos comprometimos a hacer, que sabemos que estamos de acuerdo en la mayoría de esas cosas. Entonces, el tono de la música, los tiempos es una cuestión que vamos a tener que mejorar en la comunicación, en la fluidez, y eso yo también lo asumo como autocrítica”, dijo. 

Por último, el ex dirigente estudiantil aseguró que uno de los desafíos del oficialismo es intentar resolver sus desacuerdos en el plano interno, para no proyectar hacia la ciudadanía “la sensación de que eso nos está fracturando, porque pueden ser diferencias que se manejen en otros tiempos, de otras formas y creo que pueden ser mucho mejor procesadas de lo que lo hemos hecho estas dos semanas”, declaró. 

En ese sentido, Jackson afirmó que el pasado viernes, en el cónclave encabezado por el Presidente Boric en el Palacio de Cerro Castillo, se llegó a un consenso al respecto: “lo dijeron los mismos parlamentarios en sus intervenciones: que las diferencias las tratáramos de procesar de manera interna”, cerró.